En el gobierno de AMLO se registraron un promedio de 35 tomas clandestinas por día
El Gobierno de Andrés Manuel López Obrador finalizó su administración el 30 de septiembre con un registro de 72 mil 337 tomas clandestinas de combustible, lo que equivale a un promedio diario de 35 incidentes para robar combustibles en los ductos de Pemex. Esta información fue obtenida por EFE a través de solicitudes de transparencia.
Las perforaciones en poliductos, oleoductos y gaseoductos durante su sexenio representan solo una parte del robo de combustibles, un delito conocido en el país como 'huachicol'. Este fenómeno está acompañado por una cultura que normaliza el hurto de gasolinas y gas, como lo ejemplifica la figura del Santo Niño Huachicolero, venerado por delincuentes en varias regiones, según comentó Margarita Zapata Moreno, coordinadora en México de la Red Amassuru de Mujeres en Seguridad y Defensa.
El estado de Hidalgo lideró las estadísticas con el mayor número de tomas ilegales, contabilizando 24 mil 710. Junto a entidades como Puebla y Guanajuato, Hidalgo representa un caso emblemático de la base social y cultural en torno al 'huachicoleo', indicó la experta, quien ha investigado el diseño de la estrategia de combate al mercado ilícito de hidrocarburos durante el gobierno de López Obrador.
Zapata afirmó que el robo de combustibles es una cadena compleja que involucra desde el personal de Pemex que facilita información, hasta la participación de grupos delictivos en la extracción, distribución y almacenamiento, así como aquellos que adquieren el producto robado.